En los últimos años ha sido más notoria la transformación que sufre el recurso humano en el ámbito laboral; es evidente que la forma en que se prefiere percibir el trabajo también ha ido cambiando la visión de las empresas y ha enfocado parte importante de sus recursos en su gente.
Con la llegada a los centros de trabajo de la generación del milenio, sus ideas innovadoras y necesidades de dinamismo y crecimiento acelerado; las empresas buscan atraer ese talento por otros medios más allá de una atractiva remuneración económica; pues éstos nuevos empleados ven el trabajo como una forma de llegar a su propósito de vida y por lo tanto, se encuentran en la búsqueda constante de empresas que les ayuden a alcanzarlo.
Una persona que ve su trabajo como una forma de llegar a una meta, es más productiva, proactiva, innovadora y leal para la compañía, lo cuál trae innumerables ventajas al desarrollo de su área y en perspectiva, al crecimiento de la empresa.
¿Sabes cómo encontrar un propósito en tu trabajo? Adam Smiley Poswolsky, autor del libro The Quarter-Life Breakthrough, da algunos tips para obtener o crear un trabajo con propósito:
1.- Experimenta: Si apenas te estás integrando al mundo laboral, es una buena oportunidad para experimentar y enfocarte en lo que más te agrada, si tienes oportunidad, puedes integrarte a equipos de trabajo como voluntario.
Si ya llevas una carrera laboral, nunca es tarde para experimentar nuevas formas de emplear tu experiencia y darle un nuevo enfoque a tu trabajo.
2.- ¿Quién eres?: Aparentemente suena sencillo responder a esa pregunta, pero no lo es. En numerosas ocasiones resulta complicado centrarse y saber quién se es en realidad y cuál es el propósito de nuestra vida. Sin embargo, ser realistas y tomarnos unos minutos al día para meditar acerca de nuestro verdadero yo, ayuda a enfocar nuestras cualidades en lo que realmente se busca en la vida.
Puede ser que se haya estudiado una carrera que implica estar siempre en oficina, sin embargo, estar encerrado durante mucho tiempo no resulta del todo atractivo; meditarlo y averiguarlo puede ayudar a reenfocarte y encontrar un trabajo adecuado a tus necesidades.
3.- Aprovecha tus habilidades: Es posible ser bueno en un trabajo y no disfrutarlo. Cada uno de nosotros desarrollamos distintas habilidades que nos hacen ser buenos para la ejecución de algunas tareas en el trabajo, sin embargo hay veces que no basta ser bueno para algo, sino apasionarse por ello.
4.- Encontrar apoyo: Al tomar la decisión de reenfocar tu visión del trabajo y encontrar un propósito para el mismo puede desencadenar una serie de decisiones que requieren de apoyo.
Rodéate de personas que entiendan tu nuevo enfoque y te puedan proporcionar el impulso necesario para lograrlo, ya sea con ideas nuevas o hasta por medio de relaciones personales.
5.- Sonríe todos los días: Después de realizar los 4 puntos anteriores no tendrás razones para no hacerlo, por lo que mantener una actitud positiva y sonreír todos los días te ayudará a cambiar por completo tu forma de ver el trabajo.
Interesante… lo mejor que podemos hacer para cambiar nuestra situación es comenzar con mejorar la visión que tenemos de las cosas y sobre todo de lo que hacemos.